¿Qué puedo hacer si alguien me traicionó?

Como animales hipersociales que somos, la confianza es un elemento crucial para la supervivencia.
Por ello, entregarnos a alguien y sentir que esa confianza ha sido traicionada es una de las experiencias más dolorosas que podemos atravesar.
Tanto si se trata de una amistad o una relación de pareja, como una relación familiar o profesional, la traición rompe algo fundamental: el sentido de seguridad y conexión con el otro.
Cuando esto sucede, es normal sentirse desorientado y que nos embarguen emociones como tristeza, rabia, incredulidad e incluso culpa.
¿Qué podemos hacer?, te comparto 6 estrategias:
1.- Permítete sentir (aunque sea incómodo)
A menudo, la primera reacción tras conocer la traición es querer entender por qué ocurrió.
Sin embargo, antes de buscar respuestas, conviene dar espacio a las emociones.
De lo contrario, las emociones podrían nublarte e impedir que integres correctamente la información.
Ojo, no hay una forma “correcta” de como sentirse tras una traición, pero lo fundamental es no reprimir lo que sientes.
2.- No te responsabilices de las acciones del otro
Es habitual que después de una traición nos hagamos preguntamos como:
“¿Fui demasiado ingenuo?”, “¿me lo merecía?”, “¿cómo no lo vi venir?”.
Aunque revisar tu actitud es sano, es importante no cargar con una culpa que no te corresponde.
Cada uno de nosotros debe responsabilizarse de sus propias acciones.
3.- Habla de lo que pasó (pero elige bien a quién)
Hablar con alguien de confianza puede ayudarte a procesar lo vivido y poner en palabras lo que sientes.
A veces, incluso escribir un diario o redactar una carta (aunque no la entregues) puede ayudarte a ordenar tu mente y descargar emociones.
4.- Reflexiona sobre tus límites
Ser traicionado por alguien en quien confiabas es una herida real y bastante dolorosa.
Sin embargo, esta no define tu valor, ni tu capacidad para construir relaciones sanas en el futuro.
Sentir, reflexionar, establecer límites y, cuando estés listo, soltar…, es el camino que te devolverá la paz y la confianza en ti.
5.- Decide si quieres (o no) perdonar
El perdón es un proceso muy personal. a veces, llega con el tiempo, y otras no llega nunca.
Perdonar no siempre implica reconciliarse, sino soltar el resentimiento sin volver a vincularte con quien te hizo daño.
6.- Reconstruye la confianza, empezando por ti
Una de las heridas más profundas que deja la traición es la desconfianza, no solo hacia el otro, sino hacia uno mismo.
Recuerda que la confianza no es algo que se pierde del todo, sino algo que se puede reconstruir.
¿Frase matona?
"Evita llorar a quien no te llora, extrañar a quien no te valora y dedicar tiempo a quien no te merece." ¡Zas!