El Síndrome del Espejo y sus principales características

¿Haz escuchado esta frase alguna vez?, “espejito, espejito, ¿quién es la más hermosa?”, son las primeras palabras que dice la reína en la película de Blanca Nieves, y puede ayudarnos a ilustrar, de manera muy gráfica un trastorno poco conocido, el "Síndrome del Espejo".
También se le conoce como síndrome de Ballantyne Runge, y quienes lo padecen generalmente observan su reflejo en el espejo, pero no para razones positivas, si no para buscar de defectos físicos en su cuerpo.
Según especialistas, esté trastorno esta relacionado con la distorsión de la realidad del cuerpo propio, de manera que distorsiona o magnifica aquellos defectos que cree que tiene pero en la realidad puede que no los tenga, o sean mínimos.
Podría decirse que es la preocupación por uno o más defectos o imperfecciones percibidas en el aspecto físico, y si bien para quien los padece pueden ser problemas series, para otras personas pueden ser minúsculos o insignificantes.
El mirarse al espejo de forma repetitiva podría ser una muestra de preocupación por el aspecto físico, causando malestar, y esto puede desencadenar otros problemas como baja autoestima, vigorexia o adicción al ejercicio, trastornos alimenticios, etc.
Ahora, ¿cómo puedo saber si lo tengo?, te voy a decir los 4 principales síntomas de este trastorno:
1.- Crees que todos te miran
Tienes una idea delirante de referencia, y la creencia de que otras personas se fijan especialmente en ti, ya sea para criticarte o para burlarse de tu aspecto.
2.- Te avergüenzas de tu aspecto
Hay vergüenza por tu apariencia, dando excesiva importancia a su aspecto físico.
3.- Buscas cambiar constantemente tu físico
Buscas realizarte tratamientos estéticos o cosméticos por tal de mejorar su aspecto, o, conviertes tu aspecto físico en una obsesión que cambia constantemente.
4.- Aislamiento
Dejas de salir de casa, no salir con amigos ni familiares, no ir a trabajar o la escuela, etc; esto porque crees que van a tener una idea negativa por tu físico.
¿Frase matona?
"Cuando hablamos mal de alguien, siempre proyectamos algo de nosotros: lo que más carecemos o lo que más necesitamos" ¡Zas!